En una antigua casa ceretana exquisitamente restaurada conservadndo la estructura de la edificación original, encontramos este pequeño y acogedor hotel.
Un lugar para amantes de la naturaleza y los deportes de nieve y montaña.
Sus habitaciones están decoradas con elementos cálidos de estilo minimalista, existen dormitorios superiores con cama king size y vistas a las montañas y junior suites que pueden acoger hasta cuatro personas.
Los desayunos se elaboran con productos de proximidad, embutizos de la zona, respostería casera y zumos naturales.
Dispone de servicio de alquiler de bicicletas, guardabicis y guardaesquís.
Muy próximo a las estaciones de esquí de Massella, a 20 km., y La Molina a 28 km. Puigcerdà queda a 15 minutos en coche y Andorra la Vella a 50 .