Hotel bastante descuidado, cogimos una habitación superior y al llegar, vemos que compartimos terraza con la habitación de el lado. Habitación amplia pero muy simple en la que el lavabo está separado por una gran cristalera con una puerta central de cristal, la cual estaba rajada de punta a punta. La cortina de la ventana del baño encima del WC( por la noche la colocaron al revés, mostrando suciedad en la barra). El jacuzzi bien, pero cuál es nuestra sorpresa al llenarlo...a mitad nos quedamos sin agua caliente!!! Vamos a recepción y nos comenta la responsable(posiblemente la dueña) que es que estaban lavando los platos y que consumía mucho!!! Muy amablemente nos dice que si queremos, que paran.... Por la mañana, vamos al spa. Sorpresa!!!! Cogemos los albornoces y estaban exageradamente estropeados, deshilachados y roídos... Llegamos y el agua del jacuzzi no es que estuviera trasparente.... No estuvimos la hora completa.
A destacar en positivo, el servicio del comedor, la cena y el desayuno.
Da la sensación que hay una persona que está en todos lados y no puede atenderlo todo, falta de mantenimiento.